¿«Dónde fue anoche, elegante y noble querido hijo mío»?
¿«Dónde fue ayer por la tarde»?
«Fue con mi dama, señora, mi madre, mi corazón está enfermo».
¡«Fue con mi dama, ay de mí que me muero, ay»!
¿«Qué cosa ella se le dio para cenar, elegante y noble querido hijo mío»?
¿«Qué cosa ella se le dio»?
«Una anguillita frita, señora, mi madre, mi corazón está enfermo».
¡«Una anguillita frita, ay de mí que me muero, ay»!
«Solo se le dio el veneno, elegante y noble, querido hijo mío».
«Solo se le dio el veneno».
¡«Mande a llamar el notario, señora, mi madre, mi corazón está enfermo»!
¡«Mande a llamar el notario, ay de mí que me muero, ay»!
¿«Qué cosa le deja a su madre, elegante y noble querido hijo mío»?
¿«Qué cosa le deja a su madre»?
«Dejo mi palacio, señora, mi madre, mi corazón está enfermo».
«Dejo mi palacio, ay de mí que me muero, ay»
¿«Qué cosa le deja a sus hermanos, elegante y noble, querido hijo mío»?
¿«Qué cosa le deja a sus hermanos»?
«Carruajes con caballos, señora, mi madre, mi corazón está enfermo».
«Carruajes con caballos, ay de mí que me muero, ay»
¿«Qué cosa le deja a sus hermanas, elegante y noble querido hijo mío»?
¿«Qué cosa le deja a sus hermanas»?
«La dote para casarlas, señora, mi madre, mi corazón está enfermo».
«La dote para casarlas, ay de mí que me muero, ay».
¿«Qué cosa le deja a sus servidores, elegante y noble querido hijo mío»?
¿«Qué cosa le deja a sus servidores»?
«La vía para entrar a misa*, señora mi madre, mi corazón está enfermo».
«La vía para entrar a misa, ay de mí que me muero, ay»
¿«Qué cosa le deja a su dama, elegante y noble querido hijo mío»?
¿«Qué cosa le deja a su dama»?
«La horca para ahorcarla, señora mi madre, mi corazón está enfermo».
«La horca para ahorcarla, ay de mí que me muero, ay».
Nota anche come L’avvelenato, questa ballata è attestata già dal 1629 (v. qui e qui).
La versione originale pare che fosse in toscano (precursore dell’italiano), e ne esistono svariate versioni in tutta Italia, con influenze dialettali locali, ma la versione più completa tra quelle note è quella «comasca» (quindi in lombardo occidentale, ma con fortissime influenze dell’italiano toscano/letterario).
V. anche qui e qui.
Quella trascritta qui è una versione ridotta e abbastanza fedele alla lezione comasca, quindi in italiano antico mescolato a lombardo occidentale.